A continuación se incluye un resumen en español de nuestro nuevo artículo científico que se publicó en noviembre de 2024, en colaboración con Wildlands Network, sobre las tasas de cruce de la fauna silvestre en diferentes tipos de barreras fronterizas. Para leer la publicación original en inglés, visita el sitio web de la revista Frontiers in Ecology and Evolution. Si tienes preguntas, comunícate con nuestro gerente del programa de fauna, Eamon Harrity.
El muro fronterizo entre Estados Unidos y México impide el movimiento de la fauna silvestre
Las fronteras geopolíticas pueden presentar desafíos para la conservación de la vida silvestre debido a las diferentes regulaciones ambientales y, cada vez más, a la existencia de barreras fronterizas. Actualmente en 2024, existen aproximadamente 1,023 km de muros fronterizos (es decir, muros de bolardos de acero de 5.5-9.1 m de alto con espacios intersticiales ≤10 cm) y 169 km de barreras vehiculares (es decir, estructuras de acero variables diseñadas para detener vehículos, pero no peatones) a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México. Se instalaron algunos pequeños pasajes para la vida silvestre (21.5 x 27.8 cm) en los muros fronterizos, pero existen muy pocas adaptaciones para la conectividad de la vida silvestre. Como tal, las consecuencias ecológicas de las barreras fronterizas pueden ser graves y documentar la capacidad de la vida silvestre para atravesar estas barreras será esencial para los esfuerzos de conservación. Colocamos 36 cámaras de vida silvestre a lo largo de 163.5 km de la frontera entre Estados Unidos y México en Arizona y Sonora para evaluar las tasas de cruce a través de las barreras fronterizas para 20 especies terrestres. Observamos 9,240 eventos de vida silvestre, incluidos 1,920 eventos de cruce exitosos. Todas las especies focales cruzaron a través de barreras vehiculares, mientras que el venado cola blanca, el venado bura, el oso negro, el tejón, el guajolote silvestre y el puma parecieron incapaces de cruzar a través de espacios intersticiales en los muros fronterizos. Los pequeños pasos de vida silvestre mejoraron las tasas de cruce para varias especies, incluidos el tejón, el pecarí de collar, el coyote y el puma. Sin embargo, los pequeños pasos de vida silvestre fueron escasos, con solo 13 a lo largo de más de 130 km de muro fronterizo continuo y no permitieron que el oso negro, los venados y el guajolote silvestre cruzaran. La investigación adicional sobre los impactos de las barreras fronterizas y las posibles estrategias de mitigación serán fundamentales para una conservación transfronteriza eficaz.